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Informe de la REC evidencia hechos que comprometen la transparencia, imparcialidad y eficiencia de la jornada de inscripciones y actualización del Registro Electoral

La Red Electoral Ciudadana (REC), integrada por el Centro de Justicia y Paz (Cepaz), el Observatorio Global de Comunicación y Democracia (OGCD) y Voto Joven realizaron por segunda oportunidad un informe sobre la jornada de inscripciones y actualización de datos en el Registro Electoral (RE).

La REC, fundada en agosto de 2016, es un espacio común para el trabajo articulado de organizaciones de la sociedad civil, convocadas para ejecutar acciones dirigidas a fortalecer y defender la participación y los derechos políticos de los ciudadanos desde la perspectiva de los derechos humanos.

Tras cuatro años de documentación de lo que ha sido el proceso de socavamiento de derechos civiles y políticos en el marco de los procesos electorales celebrados en Venezuela, el trabajo de la REC se mantiene como un ejercicio de ciudadanía y como una vía de expresión de los ciudadanos ante la actual crisis que vive el país.

En la jornada de inscripciones y actualización de datos en el Registro Electoral, convocada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) del 13 al 29 de julio, se documentaron diversas irregularidades en el proceso, como el acortamiento de los lapsos de inscripción, el proselitismo mediático, la participación significativa de militares y milicianos en un proceso que debe ser eminentemente civil, la promoción político partidista en los centros, y la inobservancia de los protocolos biosanitarios destinados a evitar el contagio de COVID-19, lo que puso en riesgo no solo a los funcionarios de la administración electoral, sino a quienes ejercieron su derecho a participar en los procesos electorales.

Reducción de días y cantidad de centros disponibles

El Registro Electoral es parte fundamental de todo evento comicial. La incorporación en una base de datos de todas las personas con derecho al voto es uno de los pasos iniciales de cualquier elección, clave para la organización de los comicios y más importante aún, para verificar la integridad y autenticidad de los mismos.

El conocimiento de los números del Registro Electoral no se escapa a la opacidad del resto de las cifras oficiales en Venezuela. El Consejo Nacional Electoral no publica desde hace muchos años la información actualizada de dicha base de datos.

La situación es aún más grave si se revisa la duración de las jornadas especiales de inscripción y actualización del Registro Electoral y los números de puntos habilitados, especialmente desde el año 2012. Hay una enorme brecha entre la cantidad de personas con derecho al voto que no se han inscrito en el Registro Electoral, el número insuficiente de centros habilitados y el breve lapso otorgado para la inscripción y actualización

Entre mayo de 2018 y enero de 2020 se contabilizaron apenas 223.294 nuevos inscritos, aunque los cálculos de diversos especialistas en materia electoral suponen que hay al menos dos millones de venezolanos con derecho al voto que no están inscritos en el RE.

El Consejo Nacional Electoral convocó el 1 de julio las elecciones parlamentarias 2020, y diez días después publicó el Cronograma Electoral, en una clara transgresión a la legislación vigente, pues el artículo 42 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales (Lopre) establece que “en el acto de convocatoria, se hará público el Cronograma Electoral del respectivo proceso, el cual contendrá las etapas, actos y actuaciones que deberán ser cumplidos de conformidad con lo previsto en esta Ley”.

Este cronograma contemplaba un lapso 14 días para una jornada especial de inscripción y actualización, del 13 al 26 de julio, con la habilitación de solamente 551 centros de inscripción y actualización a nivel nacional, a pesar de estar en ese momento en plena cuarentena parcial por la pandemia, que a la semana siguiente, se extendería a todo el territorio venezolano. Este lapso se amplió a 17 días, por una prórroga de 72 horas aprobada posteriormente. Sin embargo, es considerado un tiempo muy breve dada la significativa cantidad de personas, especialmente jóvenes, que no se han inscrito en el Registro Electoral.

Si lo comparamos con respecto a las elecciones parlamentarias inmediatamente anteriores del año 2015, encontramos que para esos comicios se constituyeron más de 1.500 puntos a nivel nacional en un lapso de más 5 meses, del 2 de febrero al 8 de julio.

Además, el CNE no informó públicamente la ubicación de Centros de Inscripción y Actualización Móviles, pero su funcionamiento se verificó durante el monitoreo ciudadano de la jornada de inscripción y actualización del Registro Electoral. Incluso dos de estos puntos estaban ubicados en instalaciones del Programa Social Mercado de Alimentos S.A “Mercal”, adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Alimentación, en el Distrito Capital (sede principal) y en el estado Carabobo.

Parcialidad, proselitismo y propaganda política

A pesar de que el marco legal venezolano prohíbe expresamente a los funcionarios y empleados públicos tener parcialidad político-partidista en el ejercicio de su mandato, sin embargo, se observó durante toda la jornada un claro sesgo en la invitación de funcionarios (5%) y organismos públicos (6%), comenzando por Nicolás Maduro, el cual convocó públicamente, a través mensajes difundidos en redes sociales, a la juventud de la patria a la jornada del RE, incluyendo, expresamente, a la juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), incurriendo en proselitismo mediático.

En la jornada de Inscripción y actualización del Registro Electoral se evidenció propaganda a favor del partido de gobierno, a través del uso de mensajes, símbolos, imágenes e inclusive actos de promoción político partidista dentro de los centros. El uso de mensajes, símbolos e imágenes de promoción político partidistas durante la inscripción y actualización del Registro Electoral contraría la igualdad, imparcialidad y transparencia que debe existir en todos los actos electorales según la Constitución y la Ley. Un caso de extraña gravedad obtenido en el seguimiento fue la imagen de un funcionario presuntamente encargado de la captahuellas portando indumentaria con símbolos del partido oficialista.

Se verificó una significativa participación de efectivos militares y de la milicia en funciones (26%), lo cual pareciera excesivo dado que se refiere a un proceso eminentemente civil. Se entiende la necesidad de implementar medidas de custodia en los centros y de garantía del orden público, inclusive el apoyo en los protocolos biosanitarios, pero es imperativo hacer un llamado de atención para que no se transgreda la naturaleza eminentemente civil del proceso de registro y actualización de datos.

Inobservancia de medidas para evitar el contagio

Se observaron movilizaciones de personas durante la jornada para ser inscritas o que actualizaran sus datos en el RE, en la mayoría de los casos desatendiendo las normas mínimas biosanitarias en plena cuarentena.

También en el seguimiento de la jornada especial de inscripción y actualización se pudieron constatar graves debilidades en la aplicación de los protocolos biosanitarios anunciados por el CNE.

Aunque se pudo observar a través de las imágenes recopiladas en la red social Twitter un uso masivo de los tapabocas, en varias oportunidades se evidenció un manejo incorrecto o inclusive, su no utilización (8%). De igual forma se observó el no uso de las máscaras acrílicas por parte de los funcionarios (13%), acatamiento parcial del distanciamiento físico de los usuarios (43%) y de los funcionarios (20%). Con las limitaciones que supone esta metodología, se pudo constatar en algunos casos el aparente, y por eso no se contabilizó, uso del alcohol en gel, mucho más cuando se refería a las máquinas captahuellas y la desinfección de los centros.

A pesar de la recomendación expresa de la OEA en su Guía para organizar elecciones en tiempos de pandemia (2020), de “promover la entrega de recibos, comprobantes, certificaciones, a través de métodos informáticos, enviados por medio de correo electrónico u otro dispositivo” para impedir el contagio, durante la jornada especial de inscripción y actualización del RE se hizo entrega de comprobante físico a los usuarios y se comprobó la inexistencia de señalización o de medidas especiales para los grupos más vulnerables.

Este informe de la Red Electoral Ciudadana identifica hechos que comprometen la transparencia, imparcialidad y eficiencia de la jornada especial de inscripción y actualización del Registro Electoral convocada por el CNE.

Consulte el informe aquí 

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