El Foro por la Vida y ONG de Derechos Humanos rechazan las acusaciones en contra del Programa Venezolano de Educación Acción en Derechos Humanos (Provea) promovidas por sectores argentinos pro-gobierno venezolano, que intentan desprestigiar el trabajo de las organizaciones civiles venezolanas. Todo ello en medio de la crisis estructural más grave de la historia contemporánea del país, con terribles consecuencias para la garantía y disfrute de los derechos humanos.

Desde 1988, Provea es una de las organizaciones dedicadas a la investigación, promoción y defensa de los derechos de todas y todos. Esto implica la defensa universal de cualquiera que haya sido víctima, sin distinción de raza, credo, género, ideología, postura político-partidista o religiosa. Así lo demuestra el apoyo a un Nicolás Maduro sindicalista, quien recibió asesoría de la organización cuando le fueron vulnerados sus derechos laborales como trabajador del Metro de Caracas.

Provea, en el año 2002, recibió y atendió las llamadas de auxilio de la dirigencia partidaria del presidente Chávez en el poder, perseguida tras el golpe de Estado del 11 de abril. Provea fue la organización que solicitó medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para proteger al entonces diputado Tarek William Saab.

Provea, próximo a cumplir 30 años, recibió el Premio Internacional de Derechos Humanos Emilio Mignone. Este reconocimiento no responde a una filiación ideológica, sino al trabajo sistemático, y continuado en la defensa y promoción de los derechos humanos. Estas cualidades son reconocidas por organizaciones pares regidas por los mismos principios de universalidad y solidaridad, por encima de cualquier parcialidad.

La población venezolana padece una crítica situación que degeneró en la vulneración de sus garantías fundamentales, como el derecho a la alimentación, a la salud, a la vida, paralelo a un vaciado institucional que desnaturalizó el ejercicio del derecho a la participación y criminalizó la protesta social.

Resulta lamentable que en este contexto, sectores que se autodenominan “progresistas” apoyen a un régimen autoritario que muestra su indolencia, en particular, hacia a los más pobres, al promover e intensificar la dependencia social y económica como mecanismo de chantaje partidista para obtener votos.

Son los más pobres las principales víctimas de un gobierno autoritario que persigue hasta encarcelar a trabajadores que denuncian y protestan; que allana, roba y asesina en los sectores populares, bajo lógicas militaristas, con la excusa de acabar con la delincuencia.

La única bandera política de las organizaciones de derechos humanos, es la defensa universal irrestricta de estos derechos, independientemente de los intereses, filiaciones, parcialidades de las víctimas, frente a la arbitrariedad del poder, sea cual sea su forma.

Las organizaciones firmantes apoyamos la labor que desempeña Provea, en el contexto más difícil de nuestra historia reciente. Rechazamos categóricamente las descalificaciones y movilizaciones en su contra.

Vocería del Foro por la Vida:

Centro para la Paz y Derechos Humanos Padre Luis María Olaso de la Universidad Central de Venezuela
Espacio Público
Vicaría de Derechos Humanos de la Arquidiócesis de Caracas

Integrantes del Foro por la Vida:

Acción Ciudadana contra el Sida
Acción Solidaria
Cáritas Los Teques
Cáritas Venezuela
Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello
Centro para la Paz y los Derechos Humanos “Padre Luis María Olaso” de la Universidad Central de Venezuela
Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal Venezolana
Comité de Familiares de las Víctimas de los Sucesos de Febrero-Marzo de 1989 (COFAVIC)
Espacio Público
Observatorio Venezolano de los Derechos Humanos de las Mujeres
Vicaría de Derechos Humanos de la Arquidiócesis de Caracas