Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Derecho a la libertad de expresión

Ilustración: Fernando Pinilla

“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”.

Es así como se encuentra definido el derecho a la libertad de expresión según la Organización de la Naciones Unidas (ONU), recogido en el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Sin embrago, es necesario señalar que a pesar de que este derecho es reconocido en 1948 al ser incluido en la Declaración previamente señalada, la idea de la libertad de expresión tiene sus orígenes a finales del siglo XVIII con la Ilustración, por medio de los filósofos como Voltaire, Rousseau y Montesquieu, quienes sostenían que un mundo lleno de hombres libres tendría como resultado un avance significativo tanto en las artes como en las ciencias, y claramente, en la política.

Por lo tanto, la libertad de expresión al ser considerada como un derecho humano fundamental que asegura el libre intercambio de ideas y opiniones en una sociedad plural, ha conllevado que este derecho sea establecido como el pilar principal de cualquier sociedad democrática a nivel mundial, ya que sin libertad de expresión el pueblo queda reprimido, indefenso ante las decisiones de un gobierno autoritario.

La promoción, defensa y monitoreo de la libertad de expresión se encuentra en manos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), la única agencia dentro del Sistema de las Naciones Unidas con el mandato de promover la libertad de expresión y su corolario, la libertad de prensa, quien trabaja junto a los gobiernos, parlamentarios y otros decisores en la sensibilización acerca de la necesidad de garantizar este derecho.