Con más de 30 informes presentados ante el Comité de la Convención para la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (Cedaw por sus siglas en inglés), las organizaciones de la sociedad civil independiente denunciaron la falta de interés del Estado venezolano en resguardar los derechos de las mujeres.
Las organizaciones de la sociedad civil venezolana han sido consecuentes en el seguimiento de la realidad que viven las mujeres en Venezuela en un contexto de emergencia humanitaria compleja y de crisis de múltiples dimensiones que atraviesa el país. La realidad que viven las mujeres en Venezuela es el espejo más evidente de las medidas que ha omitido el Estado implementar en la promoción, prevención y garantía de los derechos humanos de las mujeres, incluyendo derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, tanto en la vida pública como privada.
Informes presentados por la sociedad civil
La información expuesta en los diversos informes presentados ante el Comité ha sido producto del monitoreo, investigación y contacto directo con las víctimas que han tenido las organizaciones de la sociedad civil independiente, pues el Estado venezolano ha omitido la publicación de datos y cifras sobre la realidad de las mujeres venezolanas, como por ejemplo en el acceso a la salud reproductiva y métodos de planificación familiar, la educación, el acceso a la justicia, cifras oficiales de mortalidad materna, embarazos adolescentes, violencia contra las mujeres en sus diferentes manifestaciones, la participación en el mercado laboral, las brechas salariales, los efectos de la crisis de movilidad humana, entre otros aspectos sobre los cuales no existe información que es necesaria, no solo para conocer la realidad de las mujeres venezolanas en medio de la crisis que atraviesa el país, sino también para que desde los distintos espacios de toma de decisiones se construyan políticas públicas con perspectiva de género.
Así pues, desde el Centro de Justicia y Paz (Cepaz) junto con organizaciones aliadas hemos abordado lo siguientes aspectos ante la Cedaw:
- Participación política de las mujeres: históricamente las mujeres en Venezuela han sido desplazadas de la esfera pública y política, sobre todo de aquellos espacios de alta jerarquía. La subrepresentación de las mujeres en el parlamento (33.5%), en las gobernaciones (9%) en las alcaldías (19%), en la mesa de negociación (33%) y en otros espacios, ha traído como consecuencia que las decisiones que se toman desde estos espacios no se lleven a cabo con una perspectiva de género, y por tanto no se toman en cuentan las necesidades particulares de las mujeres.
- Acceso a la justicia para víctimas de violencia de género: debido a la existencia de estereotipos y violencia de género en el sistema de justicia, las mujeres denunciantes sufren amenazas, maltrato y violencia verbal. Aunado a lo anterior, existen barreras estructurales de acceso a la justicia y en los procesos de denuncia, lo que termina por desmotivar a la víctima. Así pues, no existe un mecanismo de justicia que trabaje sobre el impacto de las víctimas mujeres y atienda sus necesidades. Persiste para ellas un marco de violencia institucional.
- Efectos de la emergencia humanitaria compleja en las mujeres: se registraron 18 millones de personas con necesidades humanitarias en Venezuela, de las cuales 9.5 son niñas, adolescentes y mujeres. La emergencia humanitaria compleja que atraviesa el país ha afectado de manera desproporcionada a las mujeres en los distintos ámbitos como el derecho a la salud, a la alimentación, a una vida libre de violencia, a la igualdad y no discriminación, y sus derechos en torno a la situación de movilidad humana.
- Participación en la vida pública y política de las organizaciones jóvenes feministas: los movimientos feministas emergentes tienen capacidades para generar espacios de encuentro, sin embargo, preocupa que el 50% de las agrupaciones han identificado la “criminalización y persecución a las ONG” entre los principales obstáculos para realizar su trabajo. Entre tanto, el 20% de las agrupaciones feministas ha señalado el “rechazo de la sociedad a los temas que trabajan” como uno de los obstáculos para realizar su labor. Mientras que el 100% ha manifestado dificultades para acceder a recursos, desde financiamiento directo hasta recursos físicos.
- Situación de las mujeres en movilidad: según el ACNUR la mayoría las personas venezolanas en situación de movilidad requieren de protección internacional, sin embargo, las mujeres y niñas se enfrentan a vulneraciones exacerbadas en el proceso de movilidad. El aumento de los casos de trata de personas y otras formas de esclavitud moderna, es solo una muestra de la afectación diferenciada que sufren las mujeres en contextos de movilidad, lo cual, además, ha sido bajo la complacencia del Estado.
Expertas de la Cedaw mostraron su preocupación por la situación de las mujeres venezolanas
Durante el diálogo interactivo las expertas del Comité cuestionaron y consultaron al Estado venezolano sobre la situación y las medidas implementadas para abordar asuntos como los problemas humanitarios, femicidios, violencias contra la mujer, las medidas de la atención y protección integral de mujeres víctimas y sobrevivientes de violencia de género, derechos sexuales y reproductivos, migración, participación política, entre otros aspectos.
Por su parte, expresaron su preocupación por el impacto diferenciado de la emergencia humanitaria que atraviesa Venezuela en las mujeres, incluyendo a las mujeres indígenas. Reconocieron que a pesar de que Venezuela prohíbe la discriminación por género, las mujeres venezolanas siguen enfrentando perjuicios sociales e institucionales, por lo que este reconocimiento no se traduce en medidas efectivas.
Tal es así que las expertas denunciaron que no se conoce cómo funcionan, cómo están coordinados, cuáles son los recursos y los ámbitos positivos que han aportado para las mujeres los consejos y comités que han sido creados por el Estado. A nivel educativo aseguraron que los contenidos que refuerzan los estereotipos de género no han sido retirados de los planes educativos, y no existen reglamentos y protocolos para aplicar la legislación vigente, desafíos que persisten en materia de derechos humanos y la falta de acceso a bienes y servicios esenciales para las mujeres.
Aún más, las expertas aseguraron que tampoco hay datos desglosados que permitan tener en cuenta la situación de las mujeres venezolanas en su diversidad, por lo tanto, no se pueden tomar decisiones en distintos ámbitos de la igualdad de género. Mismo problema ocurre con los casos de femicidio, sobre los cuales señalaron que no se han publicado datos precisos desde el año 2016.
Próximos pasos
Próximamente el Comité presentará sus observaciones finales, una evaluación integral sobre la situación de los derechos de las mujeres en Venezuela, con recomendaciones específicas para abordar las deficiencias identificadas y fortalecer la implementación de la Convención.
El proceso de revisión que se está llevando a cabo en torno al cumplimiento de las obligaciones del Estado venezolano en cuanto a la garantía de los derechos humanos de las mujeres venezolanas, contribuye a visibilizar la realidad de las mujeres venezolanas en el país, favorece a la rendición de cuentas y a demandar al Estado a tomar acciones en pro de erradicar todas las formas de discriminación contra la mujer y garantizar el ejercicio pleno e igualitario de los derechos humanos de las mujeres.
Entre tanto, las organizaciones de la sociedad civil independiente continuarán monitoreando el cumplimiento de la Convención por parte del Estado y la implementación de las recomendaciones que sean formuladas por el Comité.