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La realidad que viven las mujeres en Venezuela es el reflejo de un Estado que no ha tomado medidas para garantizar sus derechos

La realidad que viven las mujeres en Venezuela es el espejo más evidente de que el Estado ha omitido implementar medidas efectivas para la promoción, prevención y garantía de sus derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales. Las mujeres venezolanas enfrentan desafíos significativos, incluyendo la falta de acceso a recursos y servicios básicos, la inseguridad alimentaria, la falta de acceso a atención médica de calidad y la violencia de género.

Un informe de la alianza Con Ellas señala datos de la Fundación de Lucha Contra el Cáncer de Mama (Funcamama),  que revelan que entre 2018 y 2020, el 100% de las mujeres con metástasis de cáncer de mama que asistieron a consulta ha tenido que usar recursos propios para sus tratamientos. Por su parte Acción Solidaria revela que las mujeres con VIH han sido forzadas a tener partos vaginales en vez de cesáreas, las cuales son las recomendadas en los protocolos médicos para evitar la transmisión vertical del VIH.

De acuerdo a datos aportados por Prepara Familia, el 98% de quienes realizan labores de cuidado y atención en el Hospital J.M. de Los Ríos son mujeres sometidas a condiciones emocionales extremas, que ponen en riesgo su salud mental y física y vulneran sus derechos fundamentales.

El mismo informe señala que según el Observatorio Digital de Femicidios del Centro de Justicia y Paz (Cepaz), hay una tendencia preocupante de aumento de los femicidios de mujeres venezolanas ocurridos en el contexto de la movilidad humana. Mientras que en Venezuela las cifras de muertes violentas de mujeres siguen siendo alarmantes. El Observatorio de Cepaz documentó que desde el 1° de enero hasta el 31 de julio de 2023 hubo 160 femicidios consumados y 93 femicidios en grado de frustración. En promedio hubo una acción femicida en Venezuela cada 19 horas. En total, 55 niños y niñas quedaron huérfanos. En 10 de los casos los niños presenciaron la muerte violenta de su madre.

Evidencia aportada por personas atendidas por Unión Afirmativa, refleja que en los servicios ginecológicos hay carencia de preparación para atención de mujeres lesbianas y priva la utilización de protocolos dirigidos a la atención de mujeres heterosexuales.

La inseguridad alimentaria es otro problema crítico para las mujeres venezolanas. La falta de recursos económicos para comprar alimentos disminuye su capacidad para alimentarse a si mismas y a sus familias, generando desnutrición y otros problemas de salud. Además, la inseguridad alimentaria también puede llevar a la violencia de género, ya que las mujeres pueden ser forzadas a intercambiar servicios sexuales por alimentos. Por otra parte, la falta de acceso a anticonceptivos y otros servicios de salud reproductiva puede limitar su capacidad para tomar decisiones informadas sobre su salud.

Reportajes e investigaciones que reflejan la situación de las mujeres venezolanas

La Red de Periodistas Venezolanas, a través de los trabajos elaborados por sus integrantes, ha documentado de manera exhaustiva la situación de las mujeres en el país, publicando no solo datos y cifras, sino testimonios que reflejan que el Estado venezolano, por acción u omisión, ha vulnerado de manera reiterada los derechos de niñas, adolescentes y mujeres venezolanas.

En el trabajo ¿Cuál es el costo de parir en Venezuela?, las periodistas Indira Rojas y Mariengracia Chirinos entrevistaron a 15 mujeres embarazadas y en etapa postnatal dispuestas a contar su experiencia en el sistema público de salud. Ellas relataron limitaciones económicas que les impidieron cubrir exámenes para diagnosticar riesgo de preeclampsia, infecciones en vías urinarias y bacterias en el aparato genital, entre otros casos.

El duelo por perder un embarazo es una realidad silenciada en América Latina. Muchas mujeres no reciben apoyo psicológico. ¿Qué consecuencias tienen para la salud mental las pérdidas gestionales. Al menos la mitad de las mujeres que pasan por esto tienen deseos suicidas, según devela un trabajo elaborado por Johanna Osorio.

Otro reportaje revela que en Venezuela la fracción de mujeres con trabajo o buscando empleos es cada vez menor. Las periodistas Francis Peña e Indira Rojas se dedicaron a entender el lugar que ocupa la mujer venezolana en el mercado laboral. Encontraron que 43% de las mujeres mayores de 15 años trabaja o al menos está buscando trabajo activamente. Es una cifra que no se reportaba desde 1996. Venezuela ha retrocedido 24 años en participación laboral femenina. 

El cáncer de cuello uterino es el segundo tipo de cáncer con más incidencia en las mujeres venezolanas. La vacuna contra el VPH puede prevenirlo, pero solo se consigue en el sector privado. Un trabajo de Mariana Souquett revela que Venezuela es uno de los pocos países de la región que todavía no han incluido la vacuna contra el VPH en el esquema de vacunación.

¿Qué riesgos enfrentan las periodistas que cubren violencia sexual en Venezuela? Un trabajo de Gabriela Mesones Rojo revela las dificultades y amenazas que sufren las periodistas que se atreven a investigar y denunciar estos casos, exponiéndose a hostigamientos, demandas y censuras.

En Venezuela, las madres de las víctimas de ejecuciones extrajudiciales se organizan para exigir justicia. Madres Poderosas, es una ONG que lucha contra la impunidad. Un reportaje de la periodista Yohana Marra que muestra como algunas se convierten en defensoras de derechos humanos y denuncian las ejecuciones extrajudiciales.

Gabriela Mesones Rojo relata la historia de Ketsy Medina, una activista que lucha contra la violencia de género en Venezuela tras el femicidio de su madre. El trabajo revela que en el país casi 2.000 mujeres han sido asesinadas por razones de género desde 2017.

Williamny Carrillo es una mujer trans que vive en Petare. Su cédula de identidad no refleja su verdadero género. Un trabajo de Valeria Pedicini que nos relata qué implica tener una cédula que no coincide con tu identidad de género.

En Venezuela, las mujeres con VIH enfrentan un calvario para dar a luz. No solo sufren la escasez de medicamentos e insumos, sino también el rechazo y la violencia obstétrica en los servicios de salud. Un trabajo de Katherine Pennacchio.

Huir, Migrar, Parir es un proyecto periodístico transnacional y colaborativo para entender las condiciones en las que miles de mujeres venezolanas han tenido que dejar su país, estando embarazadas.

Morella fue secuestrada por su novio en 1988 y pasó 31 años encerrada en un apartamento de Maracay. Sufrió abusos, golpes y amenazas de muerte. En 2020 logró escapar y denunciar a su captor. Yohana Marra cuenta su historia.

9 de cada 10 mujeres no tienen dinero para comprar toallas o tampones ni acceso al agua para cuidar su higiene. Tampoco las ampara una política pública que incluya el periodo femenino como una prioridad. En este reportaje multimedia y multisensorial, se visibilizan tres iniciativas han logrado minimizar la crisis asociada a la menstruación y han transformado, para bien, la vida de cientos de venezolanas.

La cruel indiferencia hacia mujeres migrantes que huyen de la violencia en Venezuela. Este trabajo de Julett Pineda hace un paseo fotográfico por la vida de mujeres migrantes venezolanas en Perú y su esfuerzo por crear espacios seguros.

Miles de venezolanas viven hoy con secuelas físicas y emocionales causadas por un precario sistema de salud que les niega su derecho a ser madres o las empuja a serlo en un país de profundas carencias. Un trabajo de Génesis Carrero Soto.

Con 94% de los hogares sin suficiente dinero para cubrir sus necesidades, la mayoría de venezolanas jamás podrían costearse un “parto humanizado” en una clínica particular. Se estima que de cada 100 mil venezolanas embarazadas o en alumbramiento, 400 mueren por las pésimas condiciones de los hospitales, complicaciones no atendidas e infecciones después del parto.

En Venezuela, las sobrevivientes de violencia de género no tienen dónde refugiarse. La ley contempla la creación de casas de abrigo, pero el Estado ha fallado en garantizar su existencia y funcionamiento. Un reportaje de Omarela Depablos.

La violencia de género es una realidad que afecta a miles de mujeres en Venezuela. Muchas de ellas necesitan salir de sus hogares para protegerse, pero no tienen opciones. El Estado solo ha creado siete casas de abrigo en 20 años, y solo una está operativa.

Más del 45% de las periodistas entrevistadas para un informe de la Red de Periodistas Venezolanas dijo haber sufrido algún tipo de acoso mientras laboraba. A pesar del nutrido acervo de investigaciones sobre vulneraciones de derechos de quienes ejercen labor de prensa, este reporte es el primero que estudia específicamente la violencia de género dentro del gremio en Venezuela.

Es fundamental que se tomen medidas para abordar los desafíos que enfrentan las mujeres venezolanas. Esto incluye la implementación de leyes y políticas que protejan los derechos de las mujeres y aborden la violencia de género y la falta de acceso a recursos y servicios básicos. Además, es importante promover la educación y conciencia sobre los derechos humanos de las mujeres y la importancia de que toda la sociedad trabaje por alcanzar la igualdad de género.

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