Con 19 votos a favor, 5 en contra y 23 abstenciones el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas aprobó este 7 octubre la resolución que renueva por dos años más el mandato de la Misión de Determinación de los Hechos, “con miras a combatir la impunidad y asegurar la plena rendición de cuentas de los autores y la justicia para las víctimas”. En esta misma resolución el Consejo solicitó al Alto Comisionado que continúe vigilando la situación de los derechos humanos en el país “informando al respecto y proporcionando cooperación técnica con miras a mejorarla.”

A través de esta resolución, aprobada por el Consejo, los Estados miembros reconocieron que continúan las violaciones de los derechos humanos en el país e hicieron énfasis en los efectos desproporcionados en los derechos de las mujeres y los niños, los pueblos indígenas, las personas de edad, las personas con discapacidad y otras personas pertenecientes a grupos en situación de vulnerabilidad.

Asimismo, a través de la resolución, el Consejo mostró su preocupación por la falta de independencia del sistema judicial venezolano, lo cual contribuye a que persista la impunidad y las violaciones a los derechos humanos en el país, e incide en la imposibilidad actual de acceso a la justicia por parte de las víctimas y sus familiares.  Aún más, con esta resolución el Consejo no dejó de mencionar su preocupación por las restricciones al espacio cívico y democrático venezolano a través de actos de persecución, intimidación y represalias por motivos políticos.

Por último, a través de esta resolución el Consejo instó al Estado venezolano a cooperar plenamente tanto con el Alto Comisionado como con la misión de determinación de los hechos. A propósito de la renovación del mandato de ambos mecanismos, el Consejo solicitó al Estado venezolano acceso inmediato, pleno y sin restricciones en todo el país, proporcionado toda la información necesaria para poder cumplir con sus mandatos.

La Misión de Determinación de los Hechos continuará su investigación sobre las graves violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad en Venezuela

Desde la fecha de su creación, en el año 2019, la Misión de Determinación de los Hechos para Venezuela ha recabado evidencias de actos que constituyen crímenes de lesa humanidad por parte del Estado venezolano. También ha recabado pruebas suficientes para determinar que el sistema judicial venezolano ha sido cómplice de estos crímenes, siendo utilizado como herramienta de persecución, en donde los jueces, juezas y fiscales, han desempeñado, a través de sus actos y omisiones, un papel importante en las graves violaciones de derechos humanos y crímenes cometidos por diversos actores del Estado en Venezuela. Finalmente, en su último informe, la Misión destacó la responsabilidad de la cadena de mando por los crímenes de lesa humanidad cometidos por los servicios de inteligencia de Venezuela como parte de un plan para reprimir a la oposición al gobierno de Nicolás Maduro. Por supuesto, en todo su proceso de investigación la Misión no ha dejado de resaltar la falta de cooperación por parte del Estado venezolano con el organismo.

La renovación del mandato de la Misión se traduce en la continuación de la documentación, investigación y visibilización de las graves violaciones a los derechos humanos y crímenes de lesa humanidad que ocurren en el país bajo un sistema judicial que no responde de forma independiente a las atrocidades de las cuales son víctimas los venezolanos.  De la misma manera, la vigencia de este mandato mantiene la posibilidad de profundizar las exhaustivas y muy importantes investigaciones que ha llevado a cabo la Misión sobre la situación de Venezuela.

Finalmente, la renovación de la Misión habla del reconocimiento de la comunidad internacional sobre las graves violaciones de los derechos humanos que ocurren en el país, y de la necesidad de encontrar un camino hacia la búsqueda de la verdad, la justicia y la reparación a favor de las víctimas y de sus familiares, pero además de la necesidad de transformaciones, empezando por lo institucional, para corregir estas fallas que perpetuan la crisis en derechos, y evitar que se sigan cometiendo las violaciones documentadas y la profundización de otros abusos.

Dos años más en la agenda internacional

Con la reciente aprobación por parte del Consejo de la resolución sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela, se mantiene abierta una agenda internacional de al menos dos años más, con mecanismos de seguimiento e investigación que continuarán presentando periódicamente actualizaciones orales e informes escritos sobre la grave crisis de derechos que existe en el país, permitiendo colaborar con otros organismos y procedimientos especiales de la ONU, e incluso con otros mecanismos de escrutinio internacional, como el proceso que actualmente cursa ante la Corte Penal Internacional, y aún más, continúa la posibilidad de establecer otros mecanismos sobre Venezuela como lo es la comisión de investigación en caso de considerar que el Estado venezolano no muestra cooperación con los mecanismos vigentes o que la crisis en derechos se agudice.

• En los periodos de sesiones del Consejo de Derechos Humanos 52° y 55° el Alto Comisionado deberá presentar informes verbales actualizados sobre la situación de derechos humanos en Venezuela. En estos mismos periodos de sesiones la Misión de Determinación de los Hechos hará lo propio, y deberá presentar informes verbales sobre su labor.
• En los periodos de sesiones del Consejo de Derechos Humanos 53° y 56° el Alto Comisionado deberá presentar informes escritos exhaustivos sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela, con una valoración detallada de la aplicación de las recomendaciones formuladas en el pasado.
• Por último, en los periodos de sesiones del Consejo de Derechos Humanos 54° y 57° la Misión de Determinación de los Hechos deberá presentar un informe con sus conclusiones.