El 26 de abril el Foro Cívico realizó un pronunciamiento a pocas horas de que el Comité de Postulaciones Electorales presente ante la Asamblea Nacional oficialista los nombres de las personas que aspiran formar parte de la directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE).

El encuentro con la prensa contó con la participación de Griselda Colina, Roberto Picón y Eugenio Martínez, quienes figuran en la lista de candidatos y candidatas propuestas por la sociedad civil, quienes estuvieron acompañados de Mariela Ramírez, del Movimiento Ciudadano Dale Letra y Beatriz Borges, directora ejecutiva del Centro de Justicia y Paz (Cepaz).

Ejercicio de derechos

Borges hizo un recuento de lo que ha sido el trabajo adelantado por el Foro Cívico en el ejercicio de derechos de la sociedad civil y en las postulaciones a candidatos y candidatas para la conformación del CNE.

«Esta rueda prensa está enfocada en el seguimiento del proceso de asignación de autoridades del nuevo CNE.  Justamente bajo el entendido que este 27 de abril el Comité de Postulaciones consignará a la Asamblea el expediente con 103 candidatos y candidatas elegibles para rectores». Recalcó Borges que el pronunciamiento del Foro Cívico se enmarca en el ejercicio del proceso de participación ciudadana y del derecho a defender la ruta electoral.

10 días para la elección de rectores y rectoras

Mariela Ramírez recordó que una vez consignado el expediente con los 103 candidatos y candidatas elegibles a rectores del CNE, los diputados contarán con diez días para que en plenaria las dos terceras partes elijan a cinco rectores principales y diez suplentes para el periodo 2021 – 2027. A juicio de Ramírez, se trata de «un hecho de trascendencia histórica en el proceso de la reconstrucción del voto en Venezuela. Esperamos que la voluntad política nos ayude a tener un CNE que responda a las expectativas del país para el fortalecimiento de las instituciones y con ellas, de la posibilidad de dar respuestas reales a los problemas de los venezolanos».

Recuperar el derecho a elegir

Por su parte Griselda Colina, candidata a rectora postulada por la sociedad civil, recalcó el compromiso que existe desde el Foro Cívico con la ruta de exigencia de derechos que nos permita avanza en la reconstrucción de una institucionalidad electoral. «Yo creo que lo primero que nos tocaría decir es que nosotros en el Foro Cívico, desde cada una de las organizaciones que presentamos estas postulaciones, conocemos el estado actual de las cosas y las dificultades y los intereses que se oponen al logro de los objetivos que nos hemos planteado. No somos ingenuos y al contrario, actuamos con la convicción de que es necesario recuperar el derecho a elegir en Venezuela, como un paso inicial en un camino hacia la democracia».

«Nosotros también sabemos que el principal responsable en el deterioro del sistema electoral es un gobierno que ha cerrado las puertas para la realización de elecciones libres. Y lo sabemos porque lo hemos documentado. Los informes de las distintas organizaciones que están aquí presentes, que nos acompañan y que hacen parte del Foro Cívico así lo dan a conocer. Nuestra presión entonces apunta a esos actores para lograr una decisión que destranque el juego y que avance en acuerdos con garantías para todos. La conformación de un CNE equilibrado en Venezuela pasa por la voluntad política de los actores con capacidad de decisión. Nuestro trabajo busca avanzar hacia mejores condiciones. Y que esas condiciones sean las que impulsen la confianza y la participación ciudadana», agregó Colina.

Desafiando la inercia política

Aseveró la candidata a rectora que trabajando con convicción lograron incluir voces de la sociedad civil en el Comité de Postulaciones Electorales. Actuando con articulación y con transparencia postularon a quince candidatos a rectores. «Relevantes actores internacionales se pronunciaron sobre la importancia de lograr un CNE equilibrado en Venezuela. Al proponer candidatos a rectores en el CNE, el Foro Cívico desafió la inercia política. Presentamos nombres no sólo con credenciales, sino también con capacidad, credibilidad, compromiso para asumir el objetivo de dar la institucionalidad electoral y la recuperación del derecho a elegir de todos los venezolanos», concluyó Colina.

Reglas claras

El periodista y candidato a rector Eugenio Martínez, indicó que «ningún sistema de votación y ninguna autoridad electoral por sí sola puede garantizar la confianza de la población en un proceso electoral y en sus resultados. La confianza en los procesos electorales comienza con una serie de factores como el arbitraje electoral imparcial institucional, seguridad jurídica y un marco regulatorio con reglas claras de competitividad».

«Desafortunadamente Venezuela y su sistema político electoral carecen de estos factores. Y eso fue justamente lo que convirtió a las elecciones convocadas para 6 de diciembre de 2020 en el evento con las condiciones políticas y técnicas más restrictivas de los últimos 20 años», agregó.

Proceso sistemático y paulatino

Sin embargo, a juicio de Martínez «esto no ocurrió exclusivamente el 6 de diciembre. Esto ha sido un proceso lento y sostenido. La intervención de los partidos políticos comenzó en 2002. La invención del código 7 y el código 8 dentro del Registro electoral para justificar inhabilitaciones políticas es un invento del año 2005. Oficializar las restricciones para que los venezolanos fuera del país se les dificulte en su mayoría votar o ejercer el derecho al voto comenzó en 2010. En 2017 se convirtió la principal fortaleza de las elecciones en Venezuela, el sistema automatizado, en una debilidad más. La observación internacional se truncó desde el año 2005».

Martínez hizo un recuento breve para recordar que la recuperación de las garantías que se han perdido probablemente también sea un proceso sistemático y paulatino, donde el CNE es la piedra angular. Pero lograr las condiciones electorales que permitan recuperar el valor del voto como instrumento de cambio no se circunscribe solamente al CNE. «Se necesita mucho más. En Venezuela es necesario acordar el restablecimiento de condiciones electorales que permitan la celebración de elecciones justas donde las reglas sean iguales para todos y transparentes. Donde se cuenten los votos de manera exacta y se respete el principio de un elector un voto. También «donde se respete el derecho a elegir, a ser elegido, y a votar sin intimidación y sin coacción».

Para Martínez es necesario recordar que recuperar el valor del voto como paso previo para la reinstitucionalización del país y una transición a la democracia requiere de todos. «No lograrlo no es un fracaso de un grupo de la sociedad civil, o de una clase política determinada. No recuperar el valor del voto como instrumento de cambio sería un fracaso para todos los venezolanos».

Oportunidad para una solución pacífica

Agregó Roberto Picón que esta profunda crisis solamente puede solucionarse «restableciendo el derecho de los partidos políticos a utilizar sus símbolos, liberando a los presos políticos, dejando sin efecto las inhabilitaciones, contando con observación electoral nacional e internacional calificada, y acordando y respetando un calendario electoral electoral para elecciones libres justas y verificables».

Alcanzar una negociación política es, para Picón, una meta compartida por casi todos los venezolanos, que vemos allí la oportunidad de una solución pacífica. «Vemos en el nombramiento del CNE una oportunidad para abonar el camino para el entendimiento entre todos los sectores de la sociedad. Un paso inicial en un camino que es largo y difícil. Un gesto que permitirá establecer la voluntad política de avanzar hacia una negociación integral».

«Tenemos el compromiso indeclinable con la construcción de una solución pacífica constitucional y electoral para resolver el grave conflicto que enfrenta Venezuela. La celebración de elecciones libres y competitivas es un paso ineludible que debemos procurar. El CNE, las otras instituciones del Estado venezolano, los actores políticos y los ciudadanos. Todos debemos ser parte de la construcción de esta ruta que necesitamos para salir de la crisis».

Activos en la exigencia de derechos

«Luego del nombramiento de los nuevos rectores del CNE, sea cual sea el resultado, desde el Foro Cívico nos mantendremos activos en la exigencia de nuestros derechos. Haciendo contraloría a la gestión del Poder Electoral y presentando una agenda de tareas impostergables. A los actores nacionales, así como la comunidad internacional, le corresponderá evaluar el desempeño de los rectores y fijar una agenda de acciones concretas que avancen en el camino de la institucionalidad electoral. El CNE será responsable de ejecutar los acuerdos que en materia electoral se logren por parte de los actores políticos», finalizó Picón.